Nicolas Bonneville
Para Nicolas, los mundos de la moda y la perfumería también están íntimamente ligados. Estilo, expresión e intención son elementos tan comunes en la creación de una colección de moda como lo son para un perfume. Para él, los desfiles de moda representan tanto la máxima expresión de la visión de un diseñador como un comentario sobre nuestro mundo global.
Nicolas Bonneville se enamoró de su oficio a los 13 años durante un viaje a Grasse. A partir de entonces, volvió allí con regularidad para aprenderlo todo sobre el mundo de la perfumería, incluidas las extracciones y destilaciones. Eligió formarse con un perfumista de Grasse, Jacques Maurel, que le recomendó el método de perfumería Jean Carles. Apasionado de las materias primas naturales, sigue pasando allí sus vacaciones coincidiendo con el periodo de cosecha de las plantas y flores utilizadas en perfumería.
Y con el mismo espíritu viaja a la India para seguir la cosecha del Jazmín Sambac, a Italia para la Mandarina y la Bergamota, a Florencia para el Iris, y a Túnez para vivir la cosecha del Azahar. Le encanta inspirarse en ingredientes naturales, e incluso los cultiva él mismo en París: Tuberose, Osmanthus, Rose Centifolia, Jasmin Grandiflorum y Mimosa.
Desde muy joven, cada año asistía a la mítica carrera de coches "24 Horas de Mans", su ciudad natal, lo que le hizo apreciar la cultura de los coches deportivos. Está apegado a los valores de las carreras de coches deportivos: resistencia, competición y espíritu de equipo. Está claro por qué Nicolas establece un paralelismo entre las carreras de coches y su propia carrera: la colaboración y el rendimiento colectivo son imprescindibles en ambas.
Siempre en busca de inspiración, Nicolas es un amante del arte. Al igual que con las fragancias, le encanta la idea de que las emociones y los mensajes que transmiten el Pop o el Street Art sean accesibles a todo el mundo. Admira la capacidad de expresarse reutilizando objetos cotidianos y reinterpretando la experiencia urbana, como hicieron Warhol, Haring, JonOne o Banksy.
Para Nicolas, los mundos de la moda y la perfumería están íntimamente ligados. Estilo, expresión e intención son elementos tan comunes en la creación de una colección de moda como lo son para un perfume. Para él, los desfiles de moda representan tanto la máxima expresión de la visión de un diseñador como un comentario sobre nuestro mundo global.
Del mismo modo, cuando participa en un proyecto, considera importante infundir la identidad y el ADN de una casa de moda en su fragancia. Nicolas Ghesquière y Hedi Slimane son algunos de los diseñadores de moda visionarios que le inspiran.
