Fanny Bal
Crear un número uno, un perfume con una fuerte firma olfativa al que la gente se encariñe. El objetivo es oler el perfume
en la calle: ésa es la mayor recompensa.
"Soy alguien apasionado, intransigente, no soy blanco o negro, pero casi también soy joven, así que creo que puedo ganarlo todo. No es cierto, por supuesto, pero es lo que me impulsa y alimenta mi pasión".
Fanny es joven y despierta. Su juventud y calma, junto con su ligero distanciamiento de las circunstancias, casi invitan a una forma de contemplación.
Fanny se hizo perfumista al convertirse en alumna de Dominique Ropion. Fue alumna, aprendiz y ayudante de Dominique en el proyecto de reorganización de la escuela de perfumería interna de IFF, que Dominique dirigía. Pero para eso había que ser audaz Fanny estaba en un programa de estudios en IFF como parte de su curso en Isipca cuando fue contratada para trabajar en el proyecto de perfumería de Isipca. Cuando terminó el proyecto, Dominique se ofreció a formar a Fanny si quería ser perfumista y así empezó todo: "Me dio listas de materias primas, fui al laboratorio a hacer mis soluciones y por la noche las olimos y me hizo preguntas. Elaboramos una tabla de clasificación de las materias primas por familias, las naturales y las sintéticas, mi tabla periódica particular. Rehicimos el programa de la escuela de perfumería. Además de los ingredientes, me hacía dibujar las fórmulas estructurales de perfumes como Trésor L'Air du Temps, fórmulas cortas que él había desarrollado con diez ingredientes, que son la esencia de esos perfumes, su esqueleto su fórmula estructural. Él me daba una de esas soluciones cortas y yo tenía que olerla y reconocer los ingredientes, escribir mi propia fórmula corta, ir al laboratorio, pesar los ingredientes, oler y corregir. Hoy, la escuela de perfumería IFF se basa en ese trabajo.
Además de ofrecer a Fanny este aprendizaje técnico, Dominique fue la figura del perfumista que materializó la profesión a la que ella quería dedicarse: "Cuando empecé mi formación, por supuesto que quería ser perfumista, crear perfumes, pero no sabía exactamente qué era eso, qué significaba. Trabajar con él, ver todo ese rigor y precisión, me hizo comprenderlo".
