"Cada recuerdo evoca un perfume".
Coralie Spicher es un alma sensible, curiosa y juguetona.
Nacida en Ginebra (Suiza), descubrió su pasión por las fragancias tras recibir su primer perfume el día de su duodécimo cumpleaños. Esa primera fragancia la transportó a un mundo mágico y emocional que se ha convertido en su patio de recreo.
Tras iniciar sus estudios de bioquímica en la Universidad de Ginebra, descubrió la Escuela Superior de Perfumería y se trasladó a París (Francia) para completar su máster. Con una primera experiencia profesional en Firmenich en Ginebra en cromatografía, se unió a la escuela de perfumería Firmenich Fine Fragrance en 2018.
Coralie encuentra inspiración en la vida cotidiana: lugares, personas, arquitectura, obras de arte, comida, ceremonias, experiencias. "Disfruto observando las costumbres de la gente, ya sea aquí o durante mis viajes, la forma en que cocinan, se visten y hablan, sus valores y los olores que encuentran cada día. Este intercambio me parece interesante y enriquecedor, y muy valioso para ayudarme a crear perfumes que les conmuevan".
Siempre curiosa, Coralie se cuestiona continuamente. "Aprendo todos los días, todo el tiempo". Su paciencia, resistencia, perseverancia y curiosidad, unidas al trabajo duro, la ayudan a transferir emociones auténticas en sus creaciones olfativas.
Coralie nunca olvida por qué empezó su andadura con las fragancias, y esto la anima a seguir adelante, explorando nuevos territorios con un equilibrio de fuerza y sensibilidad.