Ingredientes refinados e historia se mezclan en la colección de fragancias de Penhaligon’s, cuyo primer perfume, Hammam Boquet, se lanzó en 1872.
La marca nace en 1870, cuando William Penhaligon fundó una barbería en el corazón de Londres, donde atendía a nobles y artistas de la época. Su espíritu emprendedor le hizo adentrarse en el mundo del perfume, que más adelante continuaría su hijo Walter Penhaligon, demostrando que las esencias llegarían a ser la seña de identidad de la firma al crear el icónico Blenheim Boquet para el duque de Marlborough.
Desde sus inicios, Penhaligon’s ha estado vinculada con la nobleza inglesa. Así, en 1903, la marca recibe su primera Royal Warrant (autorización real como proveedor de la casa real británica) de la mano de la reina Alejandra, distinción a la que se sumarían unas cuantas más. Y esta relación sigue vigente hoy en día, como demuestra el lanzamiento de Highgrove Bouquet (2023), fragancia elaborada en colaboración con el rey Carlos III, y el hecho de que varios miembros de la familia reconocen ser fieles a algunas de los perfumes de la casa.
En 1975, abre sus puertas la icónica tienda de Wellington Street, próxima a Covent Garden, donde las fragancias se creaban y envasaban en el propio edificio.
Entre sus colecciones más aclamadas se encuentran Portraits, que recoge el espíritu de la aristocracia británica, y Trade Routes, inspirada en los artículos de lujo que llegaban a los muelles del puerto de Londres a principios del siglo XIX.