La historia de Chloé como marca de moda comienza en 1952, cuando Gaby Aghion diseña su primera colección de ropa para mujer, de líneas elegantes y con un toque romántico y bohemio. En los años 60 la marca alcanza el éxito, al conectar con la sensibilidad femenina de una nueva generación de mujeres dispuestas a demostrar su talento, y en los 70 ficha como diseñador al mítico Karl Lagerfeld, al que han seguido, después, nombres tan relevantes en el mundo de la moda como Stella McCartney y Phoebe Philo.
En 1975 la marca lanza su primera fragancia Chloé y hoy suma más de una docena de perfumes que exploran el espíritu femenino y la libertad de la mujer moderna.
Otra de las señas de identidad de la marca es el diseño de los frascos de las fragancias Chloé. Mientras que en la línea Chloé las estrías del vidrio se inspiran en el plisado Fortuny, siempre presente en sus colecciones de moda, Nomade evoca en el bolso Drew con una suave forma redondeada.