Akro es una joven marca de perfumes nicho que nace en 2018, en Londres, bajo la batuta del maestro perfumista Olivier Cresp y su hija, Anäis Cresp. Juntos crean conceptos olfativos que encuentran la inspiración en las adicciones cotidianas: el café de las mañanas, el cuero de los antiguos pubs irlandeses, el carbón de las parrillas…
Akro, que significa “adicto” en francés, se caracteriza por emplear ingredientes naturales de alta calidad en composiciones olfativas unisex que se definen por su carácter osado y disruptivo.
La propuesta de Akro se aleja de estándares ortodoxos para ofrecer experiencias olfativas distintas, aunque fácilmente reconocibles, pues parten de momentos familiares que buscar estimular nuestros sentidos y recuerdos, explorando sensaciones placenteras, fantasiosas e, incluso, provocativas.