El aroma de la salvia sclarea evoca una interesante dualidad, animal y herbácea a la vez. Su aroma, impregnado de ricos matices de alcanfor, deja notar facetas florales, mientras persiste una nota cálida, parecida al ámbar, que recuerda al tabaco fresco.
La salvia sclarea es originaria del sur de Europa y crece en Francia, Europa Central, Rusia, Estados Unidos y China. Al ser tan fragante, es muy apreciada por sus atractivas cualidades olfativas. La planta en sí tiende a crecer entre 40 y 160 cm de altura. Sus tallos superiores tienen glándulas pilosas que contienen sustancias olorosas, con las que se produce el aceite esencial. La esencia de salvia sclarea se obtiene por destilación al arrastre de vapor, mientras que el concreto y el absoluto se obtienen por extracción con un solvente.
Conocemos la salvia esclarea desde tiempos prehistóricos, y su nombre proviene del latín “salvus”, que significa “saludable”. Apreciada por su capacidad para preservar la salud y prolongar la vida, sus propiedades medicinales se reconocieron mucho antes que sus beneficios olfativos. En el trueque durante el siglo XVII, los chinos solían cambiar una caja de hojas de salvia por tres cajas de té chino.
China, Francia, Rusia, Estados Unidos
Esta versión de Eau de Parfum retoma el olor original de Eternity, reforzando por un lado la frescura aromática con la salvia, y el fondo amaderado sensual con el vetiver.
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