Cacao ingrediente del perfume

Producción

La gran mayoría de nuestros adorados granos de cacao proviene de África (Ghana, Costa de Marfil, Nigeria y Camerún), lo que representa dos tercios de la producción mundial de granos de cacao, mientras que el resto se produce en América del Sur (tanto en Brasil como en Ecuador). En el tronco y las ramas del árbol del cacao crecen delicados racimos de pequeñas flores rosadas que producen frutos bastante grandes, acanalados y parecidos a la madera, llamados vainas. La pulpa interior de una sola vaina contiene entre 25 y 50 granos de cacao. Una vez recogidos, los granos se dejan fermentar durante 10 días antes de secarlos al sol. Después de tostarlos para realzar su aroma natural a cacao, se muelen hasta convertirlos en polvo. Es durante este proceso que la grasa de los granos de cacao se derrite para revelar un líquido viscoso conocido como “licor de chocolate”.

Historia

Inmerso en una rica historia de intriga y ceremonia, el grano de cacao ha sido apreciado durante mucho tiempo por sus propiedades únicas, y venerado como un símbolo de riqueza tanto por los emperadores como por los plebeyos en la antigua Mesoamérica. Los granos de cacao, que estaban reservados solo para los más ricos, se ofrecieron en tributo al emperador azteca Moctezuma, a quien le encantaba disfrutar el codiciado grano en forma líquida en una copa de oro. Eran tan apreciados que cien granos de cacao se consideraban un precio justo a cambio de un esclavo. Tanto la palabra "cacao" como "chocolate" derivan de las palabras mayas "cacao", que significa "jugo amargo", y "chocolat", que significa "bebida caliente".

Origen

Camerún, Ghana, Nigeria

Sabías que...

Originalmente una bebida reservada solo para dioses y reyes, el chocolate ha sido durante mucho tiempo un signo de exceso y lujo, tanto que los granos de cacao se utilizaron como moneda de cambio y artículo preciado. El grano de cacao es un ingrediente dinámico, cuyas delicias se extienden más allá de sus habilidades olfativas y culinarias. Además, emite un efecto afrodisíaco sensual y siempre esquivo, por el que es considerado tanto un estimulante como un relajante.