"Esta fragancia es como un torbellino que ha recogido mis creaciones, haciéndolas girar antes del comienzo del espectáculo. Tiene tanto una sensación de deleite como de concentración extrema. Tiene la dulzura envolvente de una gran taza de cacao espeso. Nuestros sentidos están agudizados, esperan un milagro", Slava Zaitsev.