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Layering: una forma de hacer tu fragancia tridimensional

El perfume, como si se tratase de una tela, puede posarse sobre tu piel para vestirla. Carolina Herrera define el perfume como “el accesorio invisible”, una expresión muy acertada porque una fragancia complementa a la perfección cualquier look e influye sobre nuestro estado de ánimo.

Y de la misma forma que podemos vestir con prendas ligeras cuando hace calor, podemos ponernos más prendas, una sobre otra, cuando las temperaturas descienden. Lo mismo sucede con las fragancias.

Si quieres hacer de tu perfume una gema con múltiples facetas, el layering es lo tuyo. Esta tendencia surge de la pasión de Occidente por Oriente Medio y su perfumería. En esta región, tanto hombres como mujeres mezclan fragancias sin complejos desde hace tiempo.

Elisabeth Vidal, perfumista senior de Puig, explica que el ritual de perfumarse por capas con aceites, lociones corporales y distintas fragancias arraigado en Oriente ha influido a la perfumería occidental, donde se entiende por layering la combinación de dos fragancias hidroalcohólicas (eaux de toilettes y eaux de parfums) o la mezcla de aceites, cremas y lociones corporales junto a una fragancia hidroalcohólica.

“La combinación de productos perfumados no es un ejercicio que pueda realizarse de forma aleatoria y sin reflexión, sino que requiere de un buen conocimiento de las fragancias que se quieren combinar, así como una intuición o ‘visualización’ olfativa sobre el resultado de esa posible combinación, seleccionando siempre fragancias por las que uno siente un gran atractivo. Una opción es seguir las recomendaciones de las marcas, que estudian y valoran este ejercicio durante el desarrollo creativo para proponer alternativas de layering en busca de mayor frescor, ‘lasting’, sofisticación…”, puntualiza la perfumista.

Carolina A. Herrera, directora creativa de belleza de la marca, sostiene que el ritual del perfume en la cultura árabe forma parte de su identidad: “Sobre estos rituales se ha hablado mucho. Se sabe que los muebles y tapices los perfuman como un signo de respeto a los invitados, o que al sentarse en torno a la mesa nunca falta un quemador de perfumes. Pero estando allí, observándolo en primera persona, es cuando entiendes que el valor de la fragancia va más allá de lo hospitalario”. También practican el layering, como ella misma experimentó en uno de sus viajes en los que, al finalizar una velada entre amigos, los anfitriones ofrecieron una bandeja de perfumes para que cada invitado se perfumase según su gusto para crear una fragancia personal, sellando el encuentro en la memoria olfativa.

Dos posibilidades para poner en práctica el layering

Como ves, existen dos variaciones del layering: por una parte, puedes potenciar una misma fragancia, o bien puedes mezclar varias para crear un perfume inédito, únicamente tuyo.

Para la primera opción, el secreto es usar las líneas de baño de tu fragancia favorita. Al ducharte, utiliza el gel de baño y, después, la crema de cuerpo, para finalizar con la fragancia en la versión que más te guste, ya sea eau de toilette, eau de parfum o parfum. De esta forma, vas depositando sobre la piel capas de la misma fragancia, dándole así más dimensiones y facetas. La fragancia no se vuelve necesariamente más intensa, sino con más matices y, además, es más duradera.

Por ejemplo, en Acqua di Parma recomiendan utilizar gel de baño, desodorante y eau de toilette de la misma línea de un perfume para lograr una intensidad media perfumándonos por capas. En este caso, el desodorante consigue una gran fijación incluso hasta la siguiente ducha. Según la marca, es importante emplear productos de una misma colección que compartan ingredientes. Si deseas aumentar la estela, entonces la selección de productos sería la siguiente: gel de baño, crema de cuerpo y eau de parfum. Gracias a su mayor contenido en aceites, la crema corporal aumenta la fijación de la fragancia, y el eau de parfum, al tener mayor concentración de esencia (entre un 15 % y un 20 %), resalta el carácter de las notas olfativas de la fragancia.

La segunda opción se está convirtiendo en la favorita de todas aquellas personas que quieren tener un perfume único, uno que nadie más tenga. En estos tiempos de globalización, cuando la moda –y, a veces, la perfumería– nos llega a uniformar, esta es la mejor opción para sentirnos individuales, únicos y para conseguir que nuestra fragancia refleje nuestra personalidad.

Desde hace ya algún tiempo, algunas marcas promueven la mezcla de fragancias para conseguir aromas únicos. Por ejemplo, la exclusiva colección de fragancias unisex Carolina Herrera Confidential está pensada para ser utilizada mediante capas, inspirándose en el arte oriental de combinar esencias. Cada una de ellas ha sido elaborada con los más finos ingredientes, lo que se traduce en perfumes, aceites puros y elixires combinables que permiten transformar tu perfume en una esencia única y personal.

Otra colección diseñada para combinar diferentes fragancias es Atelier des Fleurs, de Chloé. Inspirada en un taller de flores, la marca propone 17 fragancias de altísima calidad y ricas en ingredientes naturales que giran, cada una de ellas, en torno a una flor.

Mientras que las fragancias compuestas con una pirámide olfativa tradicional se perciben como un ramo floral (buqué), Atelier des Fleurs permite que cada uno cree su propio conjunto floral combinando varias esencias. Desde la firma recomiendan elegir primero el perfume que servirá de base y, después, escoger hasta dos más para matizar el primero. Puedes probar a combinar Verbena, Lavanda o Neroli y, después, darle un toque floral con Rosa Damascena, Jazmín o Magnolia Alba. Si prefieres un halo atalcado, decántate por Mimosa o Cedro.

5 consejos para hacer layering con tus perfumes

Las posibilidades de perfumarte con la técnica del layering son infinitas y podría decirse que las reglas las pones tú. No obstante, si sigues las recomendaciones de perfumistas y expertos del perfume, disfrutarás mucho más de las posibilidades que ofrece el layering.

1.- Elige colecciones o líneas de fragancias que hayan sido diseñadas para utilizar con layering. Aunque esto es una elección muy personal, desde la Academia del Perfume señalan que no todos los perfumes funcionan bien mezclados con otros. De hecho, hay perfumistas que no secundan esta tendencia ya que consideran que un buen perfume debe respetarse para ser utilizado individualmente, apreciando así la evolución de todos sus matices: “No quiero desalentar a las mentes y a los corazones creativos, pero prefiero pronunciarme en contra de mezclar dos perfumes juntos… El oficio de perfumista es sumamente complejo y especializado. Algunos perfumistas inventamos catedrales góticas, otros, rascacielos neoyorquinos, y otros, más allá, pirámides aztecas… ¿Imaginas coronar el edificio Chrysler con Notre Dame? Creo que no funcionaría, ¿cierto?”, argumenta el perfumista y vicepresidente de Givaudan, Rodrigo-Flores Roux.

Pero si quieres experimentar… considera la potencia de las fragancias a combinar: si mezclas una fragancia ligera con una más fuerte –un eau de cologne con un eau de parfum, por ejemplo–, piensa que el más fuerte dominará sobre el más suave e incluso podría anularlo.

2.- Ensaya, prueba y aprueba. Haz tus mezclas en la perfumería y pide ayuda a las consejeras en la tienda para que te sugieran opciones de acuerdo con el efecto que quieras conseguir. Por ejemplo, mezclar perfumes florales con otros más cítricos habitualmente da buenos resultados.

Gérald Ghislain, fundador de las firmas nicho Histories de Parfums y Olibanum, comparte con nosotros su truco personal a la hora de hacer layering con perfumes: “Personalmente, si quiero aplicar dos fragancias, utilizo una fresca en la piel al salir de la ducha y otra ligeramente más cálida en el interior de la ropa”.

3.- Aventura. Juega con perfumes frescos y orientales o con fragancias que tu jamás hubieras pensado que tuvieran nada que ver. Puedes hacer descubrimientos asombrosos.

4.- Cuidado con los ingredientes. En general, los perfumistas recomiendan escoger perfumes con ingredientes frescos que combinan bien con notas florales y amaderadas; pero hay un ingrediente complicado para mezclar, la vainilla, ya que, debido a su fuerte carácter, acaba por acaparar todo el protagonismo.

5.- Mejor con clima fresco. Según aconseja Emmanuel Roche, creador de la casa francesa de perfumería natural de lujo Aemium, es mejor evitar el layering en verano. “El calor promueve una mayor difusión de las distintas fragancias y puede resultar una mezcla excesiva. Es preferible dejar esta técnica para estaciones como la primavera y el otoño”.

Si buscas individualidad y romper con los esquemas, el layering es sin duda para ti.