¿Cómo reconocer un perfume original? Señales para identificar un perfume falso…
¿Dónde compras tus perfumes? Si eres amante de las fragancias seguro que tienes varias tiendas donde sueles comprar tus perfumes. Pero ¿estás seguro de que te están vendiendo perfumes originales? El riesgo aumenta especialmente en internet donde cada día surgen nuevos vendedores que realizan ofertas muy tentadoras… El ahorro de conseguir el mejor precio puede salir muy caro para tu salud. Te explicamos por qué.
En primer lugar, de un perfume falso no tenemos ningún tipo de información fidedigna acerca de sus ingredientes y elaboración. Su fórmula puede contener sustancias perjudiciales para la salud o, cuanto menos, puede producir reacciones alérgicas e irritaciones. Si tuvieras algún tipo de problema dermatológico, no tendrías al otro lado ninguna figura de atención al consumidor para atender tu incidencia y ayudarte a resolverla como sí sucede en los productos autorizados.
Debes tener en cuenta que un perfume falso no ha seguido ningún control de calidad ni de seguridad, inspecciones que sí deben afrontar los fabricantes autorizados. Esto significa que el producto no ofrece ninguna garantía, cuando se trata de productos que están en contacto con nuestra piel durante horas.
Pero si hay algo que vas a notar nada más probar el perfume en la primera vaporización, es la calidad. Los ingredientes empleados para producir perfumes falsos son de muy baja calidad, por lo que tus expectativas sobre la fragancia se verán frustradas en seguida. Y no estamos hablando solo de duración y rendimiento, sino, incluso, de una experiencia olfativa desagradable. Ningún departamento de calidad ha revisado la interacción de los diferentes ingredientes del perfume ni se ha pasado ningún test olfativo.
Otro punto negativo es el impacto sobre el medio ambiente. Hoy en día, las marcas de perfumes están inmersas en una transformación para ofrecer productos de la más alta calidad bajo un enfoque sostenible. En el caso de los perfumes falsos, olvídate de protección al medio ambiente porque se habrá optado por las sustancias más económicas sin pensar en sus consecuencias para la salud y el entorno.
Si pensabas que ya habíamos terminado de repasar todas las consecuencias negativas de los perfumes falsos, aún queda una más relacionada con la economía sumergida que promueven dinámicas mafiosas y prácticas ilegales y poco éticas. En muchas ocasiones, las organizaciones que fabrican productos falsificados están vinculadas con actividades delictivas y promueven condiciones de trabajo injustas e insalubres (la industria cosmética europea pierde un 5,5% de ventas anuales y más de 3.600 puestos de trabajo por el impacto de las falsificaciones, según datos de EUIPO, Oficina de Propiedad Intelectual de la Unión Europea).
“La problemática de las falsificaciones no se limita al daño a una marca, como podría parecer, sino que tiene un grave impacto económico, social y de salud”, sostiene Val Díez, directora general de Stanpa (Asociación Nacional de Perfumería y Cosmética de España).
Disfruta de la creatividad
¿Qué es para ti el perfume? ¿Por qué te gustan unas marcas y no otras? ¿Qué te hacen sentir tus fragancias favoritas?
Cuando adquirimos un perfume no lo hacemos solo por la fragancia en sí. Indudablemente es un factor muy importante; te tiene que gustar cómo huele para hacerla tuya. Pero, normalmente, en la decisión de compra pesan otros factores como la marca, el perfumista, la propuesta olfativa…
“Al comprar un perfume falso estamos renunciando a una buena calidad de la materia prima, a la dedicación que hay detrás de cada proceso creativo, al control de calidad, a las pruebas de estabilidad… En definitiva, estamos renunciando a un buen desarrollo de la fragancia sobre la piel y a una buena duración”, explica Anaïs Pallard, Fragrance Developer Coordinator de PyD.
El perfume es un bien de consumo, pero tiene un componente creativo que lo aproxima al arte. Surge de la visión de un perfumista sobre el mundo que le rodea, asocia componentes culturales y destila una sensibilidad. Todo ello se materializa en una combinación de ingredientes seleccionados para producir un torrente de sensaciones placenteras.
“Cuando huelo un perfume falsificado, me doy cuenta de que está vacío, que han copiado una parte infinitamente pequeña”, revela el perfumista Alberto Morillas, quien señala que no hay que dejarse llevar por los precios bajos de esos perfumes, ya que quienes los venden ganan mucho dinero. “Hay muchos perfumes que son asequibles”, recuerda.
Sin embargo, los datos de EUIPO muestran que un tercio de los europeos considera aceptable comprar falsificaciones cuando el precio del producto auténtico es muy alto, cifra que asciende a la mitad en el caso de los jóvenes.
En el particular caso de las réplicas de perfume, debemos ser consecuentes de que, al comprarlas, hacemos un grave daño a las marcas originales. Las empresas que fabrican réplicas o equivalencias de perfume se aprovechan de los desarrollos, inversión y éxito de los perfumes originales, basando su modelo de negocio en un producto que emula a otro, pero que no tiene la calidad del original. No hay comparación posible entre un perfume original y una réplica.
Pallard señala que las réplicas de otros perfumes suelen caracterizarse por unas notas olfativas de baja calidad que se asemejan a las de un ambientador o un detergente, por ejemplo, y tienen, también, peor evolución.
“Al comprar un perfume falso estamos renunciando a una buena calidad de la materia prima, a la dedicación que hay detrás de cada proceso creativo, al control de calidad…”, explica Anaïs Pallard, Fragrance Developer Coordinator de PyD.
5 pistas para detectar un perfume falso
Lo primero a tener en cuenta es que debemos comprar perfumes a vendedores autorizados, ya sean tiendas físicas o e-commerce.
Evita los perfiles que venden perfumes muy baratos en redes sociales. ¿Te has dado cuenta de que si revisas la información de la empresa en su web es imposible saber quién está detrás de la venta?
1.- El film que protege el packaging
El embalaje del packaging de un perfume falso es irregular y no tiene tensión. Prueba a friccionarlo y notarás un rozamiento que no produce el material que protege la caja de un perfume auténtico, que estará sellado con firmeza como seña de garantía de que no ha sido manipulado ni abierto.
2.- Packaging
Los perfumes falsos imitan el diseño de la caja o estuche que contiene el frasco, pero se distinguen habitualmente por la baja calidad del cartón, que suele ser de poco gramaje. Además, la impresión de la caja también suele presentar irregularidades que no vamos a encontrar en una fragancia auténtica.
3.- Etiqueta
Comprueba el listado de ingredientes, código de barras o número de lote. Si no lo encuentras o está incompleto, se trata de un perfume falso.
4.- Frasco
Normalmente, el frasco de un perfume falso no está bien rematado. Seguramente se verán las juntas del vidrio para sellarlo y la cánula será más visible y ancha que la de un perfume auténtico.
5.- Esencia
Ya hemos mencionado los peligros que puede encerrar el propio perfume –se han llegado a encontrar perfumes falsos con etilenglicol, lo que conocemos comúnmente con anticongelante para coches–, pero hay una prueba visual que también nos da pistas acerca de su calidad: agita el frasco del perfume y observa cómo reacciona el líquido. Si aparece mucha espuma y tarda en desaparecer, sin duda, lo que tienes en las manos es un perfume falso (esta prueba solo es válida para los perfumes con alcohol).
Al margen de todos estos consejos, lo primordial es ser coherentes y honestos con nosotros mismos. Si un producto es sospechosamente barato o si una oferta nos parece demasiado buena como para ser cierta… seguramente es porque es un engaño.
¿Qué es para ti un perfume?
“El perfume es una forma de vestir, un complemento de mi personalidad, algo que me identifica y me sublima. Afecta a mi estado de ánimo haciendo que en algunos momentos me sienta mejor, en otros puede relajarme y siempre puede aportarme diferentes tipos de emociones positivas”, afirma la perfumista Anaïs Pallard.